Relaciones Públicas: sangre y colchón de los grandes negocios

Mientras se resuelve el hecho de que la sexualidad sea o no una necesidad vital primaria, el doctor Galbraith en su declaración otorga a la actividad negociadora un importante nivel de complejidad identificándola como una actividad humana e interactiva, reuniendo las condiciones para que también intervenga de la dinámica estratégica publirrelacionista.
El pedagogo de la
Escuela de Derecho de Harvard, Willian Ury, define negociación como “un proceso
de mutua comunicación, encaminado a lograr un acuerdo con otros cuando hay
algunos intereses compartidos y otros opuestos…”, en tanto, su homólogo
chileno, Hender Labrador, asegura que “las comunicaciones son la sangre en la
vida de las negociaciones”.
Antes de establecer una
estrategia comunicativa de concertación, es necesario que las políticas
organizacionales establezcan el estilo de negociación institucional, que puede
ser:
- Negociador duro: Busca la victoria sin importarle las pretensiones de la otra parte y con una perspectiva de corto plazo.
- Negociador suave y relacional: Cree que con una buena relación se realizan negociaciones “ganar-ganar”. Como arma principal, fundamenta su estrategia negociadora en la comunicación.
- Negociador por principios: Sabe adaptar su tendencia natural en función de las características de la negociación.
Una vez establecida la
línea de acción institucional, se selecciona la estrategia de negociación
publirrelacionista más conveniente, siendo los más empleados, el Cooperativo
(Ganar-Ganar) y el moderno Método Harvard (crea valor y dirige dilemas, en caso
de haber conflicto entre instituciones). Creer que la estrategia de negociación
comunicativa, es un asunto de simple interacción e influencia en el escritorio,
es un error grave, ya que la misma consta de tácticas “previas”, “durante” y
“posterior” de la ejecución del pacto.
- Previo a negociación: Antes de discutir los acuerdos, es necesario: (1) Ejecutar una campaña de educación e influencia, proveyendo informaciones generales de la institución, valores y fortalezas, así como las ventajas de concertar o invertir en la misma, para colocar la empresa a nivel de sus competidores, mediante sistemas comunicativos metódicos y manejados por ambas partes. (2) Enlistar los principales intereses compartidos y diferentes de las instituciones.
- Durante
negociación: El convenio no debe ser hecho con
prisa, ni con mensajes ambiguos y muchos menos mendigando, más bien se debe
tenerse: (1) Dominio retórico del tema y estilo propio de negociación, ya sea
de regateo, partiendo de una posición extrema y aplicando luego concesiones, o
creando valor, otorgando a cada quien lo justo, que no necesariamente es
igualdad. (2) Empatía para manejar los acuerdos y técnica para evitar los
desacuerdos entre las instituciones, grupo o empresas, para esta función, es
preciso conocer la cultura, fortalezas y debilidades de ambas partes y así
evitar el desarrollo del “toma y daca”.
- Posterior a negociación: Una vez finalizado el pacto, el trabajo de relación y reputación no debe descontinuarse, todo lo contrario, (1) Han de realizarse informes y publicaciones de los triunfos obtenidos a raíz de la negociación, desde la gestión de publicity y su impacto en la prensa, hasta la reacción de stakesholders comunes y opinión pública. (2) Las invitaciones a eventos, congratulaciones y demás cortesías, tampoco pueden faltar.
Una vez en medio de una
negociación, como la obtención de una licencia o un acuerdo de cooperación
entre dos compañías, hasta que la negociación no está efectivamente completada
o se apruebe su anuncio, se deben evitar divulgaciones al respecto.
Para la gestión de los
“e-negotiations” (negociaciones por internet), propios de organizaciones
internacionales con empleados, inversionistas y clientes alrededor del mundo,
la constante comunicación, a pesar de esta carecer del importante lenguaje
corporal, es de importancia vital.
Un estudio de la firma,
MarketWatch Centre for Negotiations, comprobó que el 42% de los negocios se
pierden debido a desconfianza y poca comunicación, siendo la raíz del problema
la carencia de una estrategia de comunicación.
En conclusión, se debe
considerar más que demostrada la importancia y las competencias de las
relaciones públicas en el pasado presente y futuro de las negociaciones y su
dinámica creadora del ambiente propicio que actúa como colchón o escudo para
con los clientes, inversionistas, socios y proveedores, aún en escenarios de
confrontación o crisis.
Publicado el 15 de noviembre de 2015.
Bibliografía
- El decálogo del Dircom. Asociación de Directivos de Comunicación de Catalunya.
- Mercado, Salvador. Relaciones Públicas Aplicadas. Un Camino hacia la productividad. México, 2002.
- Kayode, Oliyimi. (2014) Marketing Communication.1ra edition.
- Fernández, José. (2009) Redacción en Relaciones Públicas. Madrid.
- Armenia,. Local Government Program. 2007.
- Igual, Fernándo. Negociación Avanzada, los 7 elementos del método de negociaciones de Harvard. Madrid.
- Labrador, Hender. (2007) Método de negociación de Harvard. Universidad Catolica Andrés Bello. Chile.
- Almaz. (2014) Great Strategies You Can Use to Control e-negotiations. Everything-PR.
- Jensen, Keld. (2012) What’s Your Negotiation Strategy. Forbes.
Francisco Javier Ramos Núñez es estudiante de Comunicación Social Mención Relaciones Públicas en la Universidad Autónoma de Santo Domingo. Fundador y escritor de Ramos Entendidos.
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La negociación es el arma que nos disminuye el ego, a raíz de la busqueda constante de la ganancia que exponemos! Dios pueda bendecirte mucho Francisco concediendote el doble de lo que deseas si es su voluntad! TA+!
ResponderEliminarGracias por tu comentario Luz. Siempre es bien recibido.
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